Unidades Marítimas y Aéreas de la Segunda Zona Naval apoyaron tareas de seguridad en la Provincia de Arauco

Arauco. “Contribuir a la prevención y detección de ilícitos en la jurisdicción y aumentar la percepción de seguridad en la comunidad”, fueron los objetivos que la Jefatura de la Defensa Nacional para las provincias de Arauco y Biobío (JEDENA) definió para la operación marítima que se desarrolló en el litoral y comunas costeras de la provincia de Arauco, en el marco de las tareas de seguridad que las Fuerzas Armadas y las policías deben cumplir durante la vigencia del Estado de Excepción Constitucional de Emergencia.

En la operación naval y marítima, que se extendió desde el Golfo de Arauco hasta el área de Puerto Saavedra, en la región de La Araucanía, participaron de forma conjunta unidades marítimas y aéreas de la Segunda Zona Naval; el Grupo de Respuesta Inmediata (GRI), dependiente de la Dirección de Seguridad y Operaciones Marítimas; personal de la Capitanía de Puerto, y Carabineros de Lebu.

El Jefe del Grupo de Tarea Marítima y Comandante del Patrullero OPV “Piloto Pardo”, Capitán de Fragata Julio Carvajal, indicó que “durante el operativo se cumplieron tareas de fiscalización y policía marítima en zonas de faena en el mar, como también en sectores del borde costero en las caletas de Tubul, Quidico, Tirúa, puerto de Lebu, en las cercanías de isla Mocha, entre otros sectores del litoral”.

Tras concluir la operación de fiscalización marítima, desde la Jefatura de la Defensa Nacional para las provincias de Arauco y Biobío, se indicó que como balance de este trabajo conjunto se fiscalizó a 21 embarcaciones pesqueras artesanales y se efectuaron 36 controles de identidad.

Paralelamente, el personal naval efectuó dos evacuaciones médicas desde la Isla Santa María y brindó apoyo técnico a las instalaciones de la Alcaldía de Mar de Isla Mocha.

Con la ejecución de estas tareas de control y fiscalización marítima y de apoyo a las labores de seguridad, los recursos humanos y materiales de la Armada de Chile contribuyeron al apoyo que la institución entrega a las zonas aisladas, como también a mantener la presencia disuasiva en las costas de la región del Biobío.